INCOMPETENCIA DE LA HAYA

Señor Director:
El gobierno de Chile, conforme a lo prescrito en el artículo 28 de la Convención de Viena sobre los tratados, que establece la irretroactividad de éstos, debiera actuar con firmeza y rechazar la pretensión de Perú de someter al conocimiento y fallo de la Corte Internacional de Justicia de La Haya una materia que escapa completamente a la jurisdicción de tal corte.
Los límites marítimos con el Perú emanan de hechos y actos anteriores al Pacto de Bogotá de 1948, que da competencia a la Corte Internacional. Esos hechos y actos anteriores son los siguientes:

1.- La Guerra del Pacífico de 1879, ganada heroicamente por el pueblo de Chile;

2.- El tratado de límites de 1929, que puso punto final a las únicas dificultades pendientes con el Perú, como expresamente lo dice tal convención, y que es coincidente con la declaración del 15 de mayo de 1929, del Presidente Hoover de los Estados Unidos de América, cuando presentó las bases del que sería el tratado mencionado;

3.- Las actas y notas sobre demarcación del año 1930, relacionadas con el hito Concordia, punto inicial en la costa de la línea fronteriza;

4.- La declaración chilena de soberanía marítima de 1947;

5.- La declaración peruana de 1947. En estas dos últimas declaraciones se deja establecido que el límite marítimo seguirá la línea de los paralelos geográficos.
De esta manera, el gobierno de Chile no debe admitir que la Corte Internacional de Justicia conozca una materia que escapa completamente a su jurisdicción. Si Chile entra en el procedimiento de la Corte Internacional y plantea la incompetencia de ésta y, como sostiene el ministro Foxley, hace valer allí todos los derechos que le asisten a Chile, tal vez se esté siguiendo el camino equivocado, porque la cuestión de incompetencia podría quedar para ser resuelta en la sentencia definitiva, después que se desarrolle todo el debate sobre el fondo. La Corte Internacional carece completamente de jurisdicción para juzgar hechos que encuentran su origen en la guerra que no en vano se llamó "Del Pacífico", de 1879.
HERNÁN BOSSELIN CORREA

Abogado