Reproducción de carta publicada hace más de un año, el 9 de enero de 2007 en LA NACIÓN, donde se anticipan los juicios del PARTIDO REGIONALISTA, expuestos por el Presidente de la Comisión Política sobre la participación y la no exclusión, se promueve el necesario fin del binominalismo y se anticipa la recomposición del escenario político, opinión recogida por FLACSO.
LA NACIÓN (09/01/2007)
CARTAS.
CARTAS.
El término de la transición
Resulta un simplismo pensar que la transición se refiere solamente a los problemas derivados de las violaciones de los derechos humanos y a las restricciones políticas aún existentes por los llamados enclaves autoritarios que dejó el Gobierno militar. La transición es mucho más que eso. Para que finalice, y al fin podamos vivir en una democracia plena, participativa y sin exclusiones, es necesario que se recomponga el escenario político, hoy protagonizado por dos grandes coaliciones que se sustentan en razones instrumentales, limitadas en su evolución por un diseño electoral. Apreciamos como algo evidente la necesidad de pasar a una alineación con fundamentos más ideológicos de las organizaciones existentes o de las que surjan debido a la disolución de las que la opinión pública juzgue que han perdido su razón de existir.
Con la muerte del general (R) Augusto Pinochet desaparece la plataforma instrumental. Resta, entonces, eliminar el sistema binominal. Éste es el único camino que nos permitirá ver cómo los partidos políticos retoman su senda para que la gran mayoría ciudadana, que no se siente interpretada ni representada por la Alianza ni la Concertación, pueda optar libremente por la corriente política que más la identifique. El poder por el poder, sin un sustento ideológico que lo apoye, sin duda, promueve la corrupción.
Víctor Catalán Polanco
Santiago
Resulta un simplismo pensar que la transición se refiere solamente a los problemas derivados de las violaciones de los derechos humanos y a las restricciones políticas aún existentes por los llamados enclaves autoritarios que dejó el Gobierno militar. La transición es mucho más que eso. Para que finalice, y al fin podamos vivir en una democracia plena, participativa y sin exclusiones, es necesario que se recomponga el escenario político, hoy protagonizado por dos grandes coaliciones que se sustentan en razones instrumentales, limitadas en su evolución por un diseño electoral. Apreciamos como algo evidente la necesidad de pasar a una alineación con fundamentos más ideológicos de las organizaciones existentes o de las que surjan debido a la disolución de las que la opinión pública juzgue que han perdido su razón de existir.
Con la muerte del general (R) Augusto Pinochet desaparece la plataforma instrumental. Resta, entonces, eliminar el sistema binominal. Éste es el único camino que nos permitirá ver cómo los partidos políticos retoman su senda para que la gran mayoría ciudadana, que no se siente interpretada ni representada por la Alianza ni la Concertación, pueda optar libremente por la corriente política que más la identifique. El poder por el poder, sin un sustento ideológico que lo apoye, sin duda, promueve la corrupción.
Víctor Catalán Polanco
Santiago
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