EL MERCURIO (04.Julio.2008)
En el comedor de la presidencia del Senado fue la primera pugna colorina con el PRI.
En el comedor de la presidencia del Senado, en Santiago, se efectuó el lunes una reunión de la directiva central del PRI. Ahí estaba su presidente, el diputado colorín Jaime Mulet - quien consiguió el lugar -, además del diputado Eduardo Díaz y otros dirigentes históricos. El objetivo de la reunión era aprobar un pacto electoral con ChilePrimero (CH1) para las municipales.
En el comedor de la presidencia del Senado fue la primera pugna colorina con el PRI.
En el comedor de la presidencia del Senado, en Santiago, se efectuó el lunes una reunión de la directiva central del PRI. Ahí estaba su presidente, el diputado colorín Jaime Mulet - quien consiguió el lugar -, además del diputado Eduardo Díaz y otros dirigentes históricos. El objetivo de la reunión era aprobar un pacto electoral con ChilePrimero (CH1) para las municipales.
Sin embargo, la propuesta fue rechazada por la mayoría de los asistentes, porque los PRI "históricos" - entre ellos el secretario general, Ricardo Fernández, y el presidente de la comisión política, Víctor Catalán -, se opusieron a pactar con CH1 aduciendo que "tiene un acuerdo con la derecha".
Algunos asistentes aseguran que la discusión llegó a tal punto que Mulet les dijo que "si nos vamos a agarrar a coscachos, mejor hagámoslo altiro". Ante esto, el vicepresidente Juan Carlos Moraga le recordó que los colorines recién llegan al PRI y deben respetar lo que allí existía. Dijo además que un eventual pacto con CH1 había que consultarlo en un referéndum a las bases, las que - opinó - no lo aceptarían.
La discusión reflotó los temores de la gente del PRI en cuanto que los zaldivaristas se estarían "tomando" el partido.
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